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Informe Construya Nro. 115 - Septiembre de 2012 - Especial Fórum Construya 10 años

 
Fórum Construya
Juan José Llach: “Muchos dividendos serán derramados en el sector de la construcción”
 
El economista Juan José Llach también fue uno de los protagonistas del Fórum Construya en el Buenos Aires Design. Analizó las perspectivas macroeconómicas de nuestro país en el contexto global y señaló a la construcción como una alternativa esperable para captar los ahorros de los argentinos.
 
Lic. Juan José Llach, director de GESE en IAE Universidad Austral
 
La segunda charla del Fórum Construya estuvo a cargo del licenciado Juan José Llach, titular del Estudio Llach y director de GESE (Centro de Estudios de Gobierno, Empresa, Sociedad y Economía) en el IAE de la Universidad Austral que trató sobre La Argentina en la economía global: 2012 y después.

El economista inició su exposición sobre la economía mundial, en donde indicó que aún hay ciertos fantasmas que sobrevuelan por la actividad. “Muchos temen que se produzca un crack parecido al de la crisis del ’30, la crisis financiera de Japón entre fines de los 80 y principios de los 90 (donde la bolsa nipona y las acciones se depreciaron notablemente) y la crisis petrolera de 1973. Es que hay un cuadro recesivo agazapado sobre varios países y en una economía globalizada como la actual, todo repercute”.

Pero remarcó que los mejores aliados de los economistas son los meteorólogos (contó en forma risueña) que al “menos vaticinan que en 2013 será un año mejor en lo climático y que las cosechas serán claves para movilizar el mercado internacional y que seguramente tanto en nuestro país como en otros, muchos dividendos serán derramados en el sector de la construcción”.
 
Luego continuó con la economía global, y manifestó que “Europa todavía corre tras la crisis desde atrás: y que será muy difícil sanear las finanzas públicas y privadas sin crecer. Estimó que el euro tendría que retrasarse un poco, porque sigue siendo una moneda muy fuerte y hace que muchos países en desgracia como España o Grecia entre otros tengan problemas a la hora de hacer frente a sus pagos. Por ahora, Alemania es el único que se salva, pero el 60 por ciento de sus exportaciones van a los países de Europa y lamentablemente puede llegar a tener problemas a futuro”.

También indicó que sigue habiendo riesgos de tasas de intereses altos en los bancos de Europa y que en Estados Unidos el mercado laboral e inmobiliario presentan una recuperación desigual e inestable. Con mejoras graduales. “En Estados Unidos hasta junio último el mercado laboral había repuntado, pero en julio volvió a descender la cantidad de nuevos puestos de trabajo y aún no hay una explicación tan cierta, pero la sequía más importante de la historia en el país del Norte puede ser una de ellas y este efecto generó incertidumbre y puntos negativos”.
 
Emergentes, en primer plano
 

La charla siguió sobre el poder de los países emergentes: “Esta fase puede ser muy relevante para la Argentina y América del Sur; de los emergentes se producirá por varios lustros el 90 por ciento del aumento de la demanda de alimentos y productos básicos de las provincias argentinas”.

Llach asegura que los emergentes “llegaron para quedarse  de la mano de una oferta de trabajo ilimitada a salarios constantes, un amplio margen de aumento de la productividad (catch-up) y una creciente y mejorada inversión en educación.   Además, estos países incorporarán al consumo el  70% de la población mundial (4900 millones de personas) con demanda recíproca entre los emergentes. Y que a su vez, serán países inmersos en políticas económicas mucho más sensatas que en el pasado, con buena macro, superávit/equilibrios gemelos; tipo de cambio flexible, inflación baja o moderada y buena micro, con economía mixta clara, incentivos de mercado, atracción de inversiones”, aclaró.

Por otra parte, en Asia se vive un impacto en los commodities por consumo propio, efecto positivo sobre el consumo de los países productores (ubicados en África y América Latina).

Luego profundizó en el tema del mercado global de los alimentos: “Calculamos que es un sector en expansión con una tendencia larga, no es un ciclo. Habrá un aumento de casi 2000 millones de la población entre 2010 y 2040 y sus clases medias crecerán de 1000 a 5000 millones. Por otro lado hay una creciente incidencia del consumo en China, al que se suma India.”Estos países asiáticos mencionados generarán un aumento del consumo estimado en 19,4 para China y 9,1 para India, el resto de los países desarrollados el 52,8.

Además, aportarán al crecimiento de la demanda global de alimentos los países emergentes  que integran el resto de Asia (28,3 por ciento), América Latina (14,7) y África (9,9). Y países que por su tamaño tendrán incidencia como: Indonesia, Pakistán, Nigeria, Bangladesh, Japón, México, Filipinas, Vietnam, Etiopía, Egipto, Irán, Turquía, R. D. Congo y Tailandia.

 

En cuanto a la Argentina expresó que tiene que estar preparada para usar al máximo no sólo sus ventajas comparativas, sino también las competitivas. “Y no desaprovechar oportunidades”.

“Una de las grandes preguntas que nos hacemos es si en nuestro país podrá sostenerse en el nivel de vida de muchos millones de personas, algo que mejoró significativamente desde 2000. Creemos que sí, con un PIB que crecerá un 2 por ciento este año, pero con alertas como la inflación y el 47 por ciento de gasto público, un número muy alto. También habría que atacar al tema de la inseguridad. Pero si bien algunos datos negativos por lo del dólar y las restricciones a las importaciones, nuestra economía tiende a crecer en 2013”, dijo.

Llach calcula que la economía deja de caer, se estabilizará sobre todo en el segundo semestre de 2013 y el PIB crecerá un 3,5 en 2013. “Contribuirán los factores externos como la sequía de Estados Unidos, la recuperación de Brasil y el desincentivo al ahorro con precios de los bienes durables en US$, lo cual el retorno y los saldos positivos seguramente se volcarán al ladrillo”, argumentó.

Entre los puntos oscuros de nuestra economía advierte que las mochilas más pesadas son las distorsiones insostenibles de precios relativos en tipo de cambio y tarifas, más el alto gasto público. “Los ajustes necesarios pueden llevar a un accidente macroeconómico con recesión de mediana intensidad, diferente de las crisis devastadoras de1989-90 y 2001-02. Cuanto más se demore la corrección, más costosa será”.

También dijo que hay que estar atentos al desarrollo del interior y la dinámica, muy probable que generará en  la economía, el Gran Buenos Aires.