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Informe Construya N° 378 - Noviembre 2023 

Qué razones justifican que siga siendo beneficioso refaccionar como construir viviendas en la Argentina

Invertir en ladrillos o en construcción continúa siendo un refugio sólido para la inversión, incluso en un entorno prolongado de inflación, donde aquellos con excedentes, ya sea en pesos o dólares, valoran las oportunidades generadas por la construcción

En el actual contexto económico, especialistas en construcción aseguran que destinar capital a este sector continúa siendo una estrategia eficaz para proteger la inversión.

La inflación impacta considerablemente en los costos de los materiales de construcción, siendo más pronunciado en aquellos productos vinculados a importaciones, como revestimientos, insumos para pinturas, griferías y cuarzos para mesadas. Estas variables han generado incrementos interanuales del 150%, según informes de diversas consultoras.

Expertos en desarrollo y construcción sostienen que, a pesar de estos desafíos, seguir confiando en inversiones relacionadas con la construcción es una decisión apropiada. Tanto para nuevos proyectos como para la renovación de viviendas existentes.

Actualmente, se están construyendo más de 50.000 departamentos en la ciudad de Buenos Aires, con un dinamismo similar en la provincia y otros partidos de la región.

Un informe del Consejo Profesional de Arquitectura y Urbanismo (CPAU) reveló que aproximadamente 27.000 de estas unidades se iniciaron este año.

Una de las razones que respalda la decisión de invertir en edificación es que el costo, medido en dólar billete, se mantiene relativamente bajo en la comparación histórica.

Según la Asociación Pymes de la Construcción Provincia de Buenos Aires (Apymeco), el costo del metro cuadrado en septiembre último fue de casi USD 600, muy por debajo del promedio de los últimos 8 años (llegó a su máximo en 2017 con USD 1.700 el m2).

Aunque en el sector aclaran que la actividad no está directamente vinculada al uso de dólares, reconocen que termina generando un producto dolarizado.

Damián Tabakman, presidente de la presidente de la Cámara Empresaria de Desarrolladores Urbanos (CEDU), señaló que, para los desarrolladores, “los costos medidos en dólares resultan beneficiosos, ya que el aumento del valor de la moneda estadounidense reduce el importe para la construcción. Sin embargo, esta situación afecta tanto a los precios de venta como al poder adquisitivo de los potenciales compradores, que actualmente enfrentan desafíos significativos”. Subrayó que, en este contexto, la demanda se ve afectada por la incertidumbre, y aquellos que invierten buscan especular con sus dólares para encontrar el momento más propicio para adquirir viviendas.

También desde el CPAU se confirmó que, en los últimos 11 años, el promedio de metros cuadrados construidos alcanza los 2.350.000 m2. En el período posterior a la pandemia, es decir, en los últimos dos años y medio, este promedio se ha mantenido estable en 2.400.000 m2 por año. Según el análisis, la construcción de viviendas se mantiene sólida, sin ser afectada por las fluctuaciones económicas del país.

“Uno de los factores que mantienen activos a cientos de proyectos es el costo relativamente bajo del metro cuadrado cuando se mide en dólares. Este costo sigue siendo accesible en términos históricos, ya que aunque la inflación afecta al peso, el dólar también sube”, dijo Gerardo Azcuy, de la desarrolladora Azcuy que construye bastante en el barrio de Caballito.

La construcción de viviendas emerge como una opción para canalizar pesos en desuso. Ante la limitada disponibilidad de alternativas de inversión en otros activos, como el dólar debido al cepo cambiario, los ahorristas encuentran en la edificación privada una oportunidad para obtener rendimientos favorables.

Tabakman también señaló que la expectativa de un nuevo ciclo político (sobre todo el nuevo Gobierno nacional que asumirá el próximo 10 de diciembre) está en juego. "Se anticipa un aumento en el precio de las propiedades en uno o dos años. Invertir en este momento podría capitalizar este período, permitiendo que las propiedades actualmente en construcción se valoren más en el futuro. De esta manera, quienes opten por invertir en bienes raíces hoy podrían obtener mayores beneficios", explicó.

La inversión en bienes raíces ha demostrado ser históricamente estable y proporcionar un crecimiento de valor constante. En un contexto de volatilidad cambiaria y rendimientos negativos en la mayoría de los activos financieros, la inversión en el sector de la construcción se presenta como una opción atractiva.

Materiales

Entre los materiales, se observan notables aumentos en los precios de bolsas de cemento, griferías y pinturas, lo que presenta desafíos para los proyectos de construcción.

Matías Hernández, presidente de la Apymeco, ofrece recomendaciones para optimizar costos en este escenario. Destaca la importancia de la cautela, sugiriendo esperar en caso de compras no urgentes y disponibilidad de ahorros en dólares.

En cuanto a ferreterías, se aconseja no retener pesos y adquirir la mercadería necesaria para el futuro, considerando que los precios han aumentado en promedio un 170% en lo que va del año.

La estrategia de usar efectivo para la compra de pinturas y materiales a corto o mediano plazo se presenta como la opción más acertada en un contexto de alta inflación y volatilidad económica. Guillermo Ortega, gerente de Sui Color, destaca la conveniencia de acumular productos para remodelación y mantenimiento, considerando la depreciación del peso y la escasa disponibilidad de dólares para ahorrar."

Con tarjetas de crédito, es factible adquirir pinturas y materiales en cómodas cuotas, ya que varios bancos ofrecen la posibilidad de comprar en 3 o 6 cuotas sin interés mediante las tarjetas de crédito que emiten. Adicionalmente, existe la alternativa de recurrir a los outlets de pinturas, donde es posible obtener productos con ligeras imperfecciones en su presentación o con colores atemporales a precios hasta un 40% más bajos.

En términos de costos, un esmalte sintético blanco satinado y brillante de 4 litros oscila entre $16.000 y $21.000. Una lata de pintura látex de 20 litros para interior, dependiendo de la marca y si es blanca o de color, tiene un rango de precios de $30.000 a $50.000; mientras que para exteriores, el costo va de $35.000 a $55.000. Otros elementos como un rodillo se sitúan en unos $2.500, una lata de enduído de 4 litros en $4.000, 4 litros de fijador por $4.000, y una hoja de lija por 250 pesos.

Un dato relevante es que las empresas constructoras o personas involucradas en obras y que cuentan con los recursos pueden aprovechar para comprar y almacenar material, asegurando precios y reservando disponibilidad para entregas futuras Ortega subraya la conveniencia de esta estrategia en un contexto económico dinámico.